Sospecho que los salvaslip comerciales han comenzado a darme alergia así que este fin de semana decidí buscar una alternativa para ponerle remedio.
Buscando un patrón para hacerlos en tela, dí con un tesoro de información, La semana íntima de Kiwa Kawaii. Estoy convencida de que la leí en su momento, pero desde entonces me ha dado tiempo de sobra a olvidarla. Que bien me ha venido ahora, ¡muchas gracias!.
A lo que iba. El domingo me levanté decidida a equiparme en un momentito porque parece una costura superfácil.
Y lo es. Pero yo nunca tardo un momentito en nada. Complico todo lo simple. Me enredé buscando telas, luego releyendo y releyendo hasta decidir que combinación de materiales utilizar, luego las máquinas no estaban por la labor (la cuchilla de la over se atascaba y la canilla de la plana escupía hilo sin ton ni son), me equivoqué al coser el derecho y el revés de uno de los últimos,... Vamos, que lo que iba a ser un ratito se convirtió en todo el día, porque hay veces, pocas, en las que a cabezota no me gana nadie.
He hecho cinco, para ir probando y ver cuál me va mejor. Solo veis cuatro porque para cuando me acordé de hacer fotos ya me había puesto uno para probar.
Son muy mejorables, pero lo haré cuando sepa con que combinación de materiales me siento más cómoda.
Pocas costuras serán más por y para MI que estas, y siendo MIércoles, me voy a por otra participación para el sorteo de la supercesta del Club de las Malas Costureras.
Patrón: Kiwa Kawaii y Rojo Ababol
Telas: Restos que andaban por casa
Enlazo: Club de las Malas Costureras